Censura en La Razón por las mofas de una periodista sobre un anunciante

El periódico que dirige Francisco Marhuenda ha sacado la tijera

Censura en La Razón por las mofas de una periodista sobre un anunciante
Censura en La Razón por las mofas de una periodista sobre un anunciante

El ridículo tobogán de Estepona no deja de darnos sorpresas. La Razón tiró de ironía sobre el asunto y publicó en su web un artículo en tono cómico: "No puedo ser más fan de su alcalde de lo que ya lo soy y necesito que lo comentemos o se me hará bola. Llevo un buen rato viendo en bucle el vídeo de la concejal, bragas al viento, inaugurando el inventazo y no puedo parar de reír. No me pasaba eso desde aquel vídeo de la mamá panda que estornuda y le da un susto de muerte al bebé. Dios, lo que pagaría por haber estado en la reunión del ayuntamiento en la que se abordó el problema del desnivel entre las calles Reina Sofía y Eslovaquia, en esa tormenta de ideas demencial de la que surgió El Gran Proyecto". (Las dos almas de Jaume Roures: promociona la huelga del 8-M y lo condenan por impedirla)

La periodista Rebeca Argudo señala que "solo por las risas que nos hemos echado, están justificados los 28.000 euros invertidos en el invento. A mí, si me lo permite el alcalde de Estepona y desde aquí, me gustaría sugerir que, ya que hemos (digo “hemos” porque estoy tan emocionada con este tobogán que yo ya me siento de Estepona de toda la vida) encargado una auditoría, pues que aprovechemos y añadamos un looping vertical a mitad de trayecto, una pequeña zona de agua para salpicar a los cobardicas que deciden bajar por las escaleras y, al final, una cama elástica que propulse al usuario hasta algún lugar que interese al consistorio. Bien a urgencias directamente, bien a una calle comercial, bien a una zona de playa". 

Censura

En la cúpula del periódico se tomaron muy mal el artículo y lo retiraron de la página web. Argudo lo ha explicado en su muro de Facebook: "La columna más naif e inocua que he escrito en mi puñetera vida de primate no sentó muy bien en el ayuntamiento de Estepona".

Añade Argudo: "Y, casualmente, resulta que Estepona se gasta una pasta gansa en publi en el periódico donde se publicó. Así que en la redacción se recibió una llamada de alguien muy enfadado invitando a retirar la columna si no querían quedarse sin un anunciante premium".