El pocero que hizo el sondeo a través del cual se precipitó Julen el pasado 13 de enero en Totalán (Málaga) ha declarado en calidad de testigo.
Antonio Sánchez ha reconocido que realizó dos pozos en la finca malagueña y ha explicado que "tapó un poco el pozo" con una piedra que encontró cerca del sondeo y con un poco de tierra. (La tragedia se confirma: Hallan el cuerpo sin vida del pequeño Julen en el pozo)
En esta línea, ha asegurado que realizó dos pozos en la finca malagueña entre el 10 de diciembre y el 18 de diciembre y ha concretado que el primero de 151 metros de profundidad sí lo selló de forma hermética.
Para ello utilizó "un tubo de plástico doblado porque el que no cabía ni un palillo de dientes". El de Julen únicamente lo tapó "con una piedra grande y tierra encima". (¿Por qué estaba el cuerpo de Julen cubierto de tierra?)
Posteriormente, el pocero ha explicado el motivo por el que no selló el segundo pozo. "Porque el de la piedra no servía para nada, porque no tenía agua y porque no se metió 100 metros de tubo de plástico por el interior".
Antonio Sánchez ha confesado que puso piedras en el segundo pozo porque no iba a cobrarlo. "Si pongo una piedra en el otro, le tira la gente piedras y lo entierran y al final no tienes pozo y yo quería cobrarlo". (La autopsia preliminar desvela la causa y la fecha de la muerte de Julen)
El pocero ha hablado del dueño de la finca
El pocero ha confesado que el dueño de la finca le dijo que tenía los permisos para hacer un pozo. "Creía que tenía permisos, pero nunca me enseñó los papeles. Me dijo que no había problema".
"Yo como tenía apañado ya un pozo, yo confié en él. Yo no tengo que buscar papeles de ningún tipo. Nunca he pedido autorización, siempre lo pide el propietario del terreno", ha señalado.