El líder del PP, Pablo Casado se dio un baño de masas en el XXV Congreso de los populares europeos en Helsinki (Finlandia).
En el acto se eligió a Manfred Weber como el nuevo presidente de la formación y candidato a la Comisión para hacer frente al golpismo catalán.
La autodeterminación nunca saldrá adelante
Tal y como informan desde la página web del PP, Casado tenía la misión de convencer a Weber y según la nota lo habría conseguido. “Precisamente que todas las fuerzas de centro derecha europeas hicieran suya la propuesta de Pablo Casado contra el secesionismo ilegal en Cataluña.
Y no sólo se ha conseguido eso, sino que se ha ido más allá dejando claro que la autodeterminación nunca saldrá adelante porque no está reconocida ni en las leyes internacionales ni en las resoluciones de la ONU”, explican en su sitio.
Casado apostó, con 25 personas en ese Congreso, por “volver a ser la primera fuerza política en España, recuperar el Gobierno de nuestro país y encauzar la política económica que empieza a trasladar signos preocupantes de paralización como consecuencia del mal hacer de la coalición PSOE-Podemos, con el apoyo de los independentistas y batasunos”, como comentan en la nota de prensa publicada.
“Durante estos dos días el nombre de España ha salido ensalzado, engrandecido, frente al del Gobierno socialista de Pedro Sánchez, empequeñecido en el escenario europeo por su nula influencia y escaso arrastre que tiene sobre el resto de los Ejecutivos europeos”, sentencian sobre el tema.
También hablan de sus apoyos y de Merkel: “Europa no entiende de unos pactos contra natura que han tenido como único objetivo echar a un gobierno del PP legítimamente constituido tras dos victorias electorales seguidas. Y eso es, precisamente, lo que le han trasladado a Pablo Casado los numerosos representantes del PPE con los que se ha visto y reunido a lo largo de estos dos días: desde Ángela Merkel, comisarios europeos, ministros y presidentes de partidos hermanos de toda Europa”, finalizan en el escrito.