Carlos Herrera se ha convertido en el motor de audiencia e ingresos de la COPE, emisora que encadenó varios ejercicios de pérdidas tras la abrupta salida de Federico Jiménez Losantos de su antena.
Pero el locutor andaluz, recriado en Mataró, ha insinuado que podría dejar la emisora episcopal para enfado de su presidente, Fernando Giménez Barriocanal: "Este año lo terminamos y el próximo, lo hablamos".
En declaraciones a El Economista ha asegurado que quiere descansar: "Tengo ganas de hacer cosas de jubilado. Ir a mirar obras, mi prensa deportiva, bares... pero de momento no me dejan. No sé cuándo acabo el contrato que tengo, pero vamos a terminar este año y ya veremos el que viene".
La COPE sin plan b y la eterna retirada de Herrera
No es la primera vez que Carlos Herrera amaga con retirarse. Ya en 2010 anunciaba que quería dejar progresisvamente las ondas, y sin embargo se ha mantenido al frente de su exitoso magazine matinal. En COPE no se pronuncian sobre el asunto.
Pero está claro que en la Conferencia Episcopal no se tomarían bien una salida que podría provocar un boquete que no llenarían ni los chicos de Deportes, Paco González y compañía, que acaban de renovar por cinco temporadas.