"Prepárense para una campaña sucia, con agitación, con saqueos, con hiperactividad de toda esa legión de ociosos de Twitter que no tienen otra cosa que hacer en todo el puñetero día, y que están a la orden del silbato [...] Prepárense para todo tipo de manifestaciones en la Puerta del Sol, los sanitarios, las mareas, estudiantes cualquier colectivo [....] el mejor colectivo que pueda girar a la izquierda radical. Van a movilizar lo que puedan, toda la izquierda radical antisistema [...] y eso lo veremos en esta campaña. Aquí no se hacen prisioneros, no va a ser ninguna broma".
Con estas palabras, Carlos Herrera explicaba en su monólogo matutino en la COPE cómo será, según su intuición, futura campaña de Unidas Podemos tras la decisión de Pablo Iglesias de abandonar su puesto como vicepresidente del Gobierno para presentarse como candidato a la Comunidad de Madrid.
Un cambio completo en su rumbo dentro de la política que ha sido entendido por muchos como un 'paso al lado' del líder de los podemitas dentro del Ejecutivo nacional, y que Carlos Herrera explica desde la profunda crisis del partido morado en la Comunidad presidida por Díaz Ayuso.
"Se pone de candidato para evitar que Podemos se quede fuera de la Asamblea de Madrid, y además, se sale del gobierno para controlarlo mejor" ha asegurado el afamado locutor.
Sin embargo, Carlos Herrera asegura que, aunque Podemos consiguiera entrar en el Parlamento madrileño, o incluso postularse como partido líder en la capital española, Iglesias no decidiría quedarse en la política regional, aunque fuese en Madrid, ya que el plan de Iglesias como candidato contra Díaz Ayuso tiene un planteamiento oculto.
"No va a tomar su acta de diputado en la Asamblea de Madrid" ha señalado Herrera "Este se queda en el Congreso. Y desde el Congreso, pues va a ser a la vez parte del Gobierno, pero será también parte de la oposición, y tendrá los mismos ministros que ahora, y estará más suelto, guerrillero... llevarle la contraria a Sánchez en el Parlamento, en la calle... es lo que necesita para cuando el PSOE convoque elecciones".
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La desconfianza entre los socios, en punto de inflexión en la política autonómica
Sin embargo, Herrera destaca que el movimiento de esta semana de Pablo Iglesias, muy sorprendente, no puede ser entendido sin ampliar el foco analítico, cubriendo prácticamente la totalidad de la geografía española. "Para entenderlo, hay que comenzar por Murcia, seguir por Cataluña, continuar por el País Vasco, y llegar a Madrid" ha determinado el locutor.
"El intento del PSOE de asaltar Murcia se ha convertido, con Ciudadanos, que era el pagafantas, en una tormenta tremenda, que va a durar, porque todos los socios de Sánchez, los formales y los externos, han entendido que se quería librar de ellos, o ahora, o después de unas elecciones generales que podía más o menos adelantar, o que estaba pensando en adelantar" ha asegurado Herrera "Es un negocio en el que nunca ha habido amor".
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Así pues, serían los catalanes los primeros en reaccionar ante las intenciones de Sánchez, tras el fracaso de la operación Illa y el establecimiento de un Gobierno independentista que "va a endurecer" la factura de su apoyo a Sánchez.
Del mismo modo, la caída de la moción de censura en Murcia junto a Ciudadanos ha demostrado el poco apoyo con el que cuenta el PSOE por parte de la formación naranja, fracasando igualmente en Castilla y León, Madrid y Andalucía.
Por último, los nacionalistas vascos, al igual que ERC y ahora Unidas Podemos, han comprobado que pueden controlar mejor sus negociaciones con Sánchez estando fuera del Gobierno, haciendo 'pagar' al presidente socialista por cada apoyo recibido.
Una situación que es casi imposible que Sánchez, tal y como Herrera destaca, pueda cambiar en un breve espacio de tiempo: "Esta es la película, una mezcla de la Matanza de Texas, por La sangre derramada de la Vida de Brian, por la cantidad de facciones del Frente de Liberación de Judea [...] y lo que nos queda ahora es un gobierno dividido con socios externos echados al monte catalán o vasco, un presidente que ni puede gobernar con ellos ni puede ahora adelantar elecciones".