Desde el pasado mes de marzo, el fútbol, como otras tantas cosas en España, sufrió un giro de 180 grados: y es que las competiciones, debido al coronavirus, quedaban completamente paralizadas.
Ahora, los calendarios de encuentros entre los distintos equipos se ha normalizado, pero no así el aforo de los estadios: y es que, a pesar de la deseada vuelta del fútbol.. los estadios siguen vacíos, sin que exista la posibilidad, por el momento, de que los aficionados vuelvan a las gradas.
Algo que el FC Barcelona ha intentado cambiar de cara al próximo clásico, que tendrá lugar en el Camp Nou el próximo sábado 24 de octubre.
Así pues, el equipo azulgrana habría pedido a la Generalitat de Cataluña que se aprobara la entrada a un público reducido, de aproximadamente 1.000 aficionados, a las gradas del Camp Nou.
Sin embargo, han recibido una dura respuesta de la Consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés.
"Con la situación de ahora es muy difícil que nos podamos plantear que haya público en los estadios. No podemos adelantarnos, iremos valorando. Pero ahora, para un primer partido, no" afirmaba tajantemente.
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A pesar de la negativa de la consejera de Salud, el Real Madrid se ha visto muy favorecido por esta decisión.
Y es que, por un lado, las palabras de Vergés indican que la apertura de puertas de los estadios podrían estar muy próximas, ya que, sobre todo en la capital, las últimas semanas han arrojado números de Covid muy positivos, en tendencia a la baja.
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Por otro lado, la prohibición de la entrada afecta también a los radicales independentistas y anti madridistas, lo que garantiza que el partido, que suele ser considerado de riesgo, pueda celebrarse sin incidentes.