Zinedine Zidane mantiene su gran deseo desde que volvió al banquillo del Real Madrid: juntarse con Paul Pogba en el Santiago Bernabéu. Nada ha cambiado. Todo vuelve al punto de origen principal. El míster marsellés no quiere saber nada de otras opciones.
Sí que le gusta Eduardo Camavinga o Aouar, dos jóvenes promesas francesas que apuntan muy alto, pero el gran deseado sigue siendo el mismo: Paul Pogba. Con el mediocentro del Manchester United sigue manteniendo el contacto y desde el periódico madridista Defensa Central, a su vez, aseguran que es para hablar de su proyecto en el Real Madrid. Zizou no ha arrojado la toalla en ningún momento.
Igual de cierto es que en la directiva blanca ni se lo plantean. Ni por asomo llegará Pogba. El deseado es Camavinga, aunque un giro de guion está cerca de arroparle. El ex de la Juventus aseguró, en rueda de prensa desde Clarefontaine, que no ha tenido contacto alguno para renovar su contrato en Inglaterra… y el 1 de enero queda libre. Eso le podría empujar a salir, totalmente gratis, para cumplir el deseo de Zinedine Zidane.
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Pogba se abre la puerta
El mismo Pogba se abrió las puertas del Bernabéu, cuando ya parecía un episodio cerrado, al anunciar que su deseo seguía siendo firmar por el Real Madrid. Un guiño público que le vuelve a poner en el radar de la entidad merengue para la próxima temporada.