Pese a que Quim Torra y los suyos siguen defendiendo el carácter 'pacífico' de las protestas independentistas en Cataluña, los hechos demuestran lo contrario.
Durante la última semana, se han sucedido continuos enfrentamientos entre los independentistas radicales y las fuerzas de seguridad.
En estos enfrentamientos, se ha demostrado la fuerza real de los golpistas catalanes, que iban armados y preparados para enfrentarse a los agentes de los Mossos d'Esquadra y de Policía Nacional que intentaban mantener el orden en las calles.
Piolets, piedras, bolas de acero lanzadas con tirachinas... éstos y muchos otros elementos han sido utilizados para agredir a los agentes, muchos de los cuales han necesitado atención médica de urgencia.
Mientras tanto, los agentes antidisturbios van equipados con material disuasorio, como pelotas de goma, gas pimienta, etc, nada de ello excesivamente dañino, y todo controlado por la Generalitat, que ha intentado evitar que los radicales independentistas sufran daño alguno.
Preocupa la salud de un Policía Nacional
Según informa el JUPOL, sindicato de la Policía, preocupa el estado de salud de uno de los agentes de la Policía Nacional evacuado de Barcelona, tras sufrir un grave golpe en la cabeza con un adoquín arrancado de la calle por los 'pacíficos' independentistas. (Un Policía Nacional, herido de gravedad en los incidentes de la plaza Urquinaona de Barcelona)
Los demás compañeros de las fuerzas de seguridad ingresados o heridos progresan positivamente, recuperándose de sus heridas.