Bernardino Lombao fue el preparador físico del ex presidente del Gobierno José María Aznar. Fue el encargado de poner en forma al ex líder del Partido Popular entre 1996 y 2004. En abril de 2020, hace dos años, falleció en Boadilla del Monte (Madrid).
Lombao tenía 81 años cuando su corazón dejó de latir. Hasta 2004 fue el encargado de poner en forma a José María Aznar. Logró que el ex presidente del Gobierno pasara de ahogarse corriendo diez minutos a poder hacerse 18 kilómetros del tirón.
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"No me extraña para nada su reflexión, porque José María es un atleta de verdad. Lleva entrenando durante los últimos 20 años de su vida todos los días de la semana", explicó Bernardino Lombao un año antes de fallecer.
"Se lo toma muy en serio y no es como otros políticos, que solo corren para hacerse la foto, o, como decía Mariano Rajoy, salen a andar. ¡Sacar a pasear al perro no es hacer ejercicio! José María es especial. Como él hay pocos", añadió el preparador físico.
"Cuando nos conocimos, hacía la mariconada esa del pádel. Corría diez minutos y se moría. Ahora es capaz de correr 10 y 12 kilómetros. Y más. Depende del día puede incluso hacer 18 kilómetros. La fuerza de voluntad es lo más importante y tener un cierto talento, porque sin talento no se va a ningún lado. Él lo tiene", comentó sobre Aznar.
El éxito de José María Aznar a nivel físico se debe a tres claves que desveló el propio Bernardino. "Son tres las claves. Hacer mucho ejercicio, comer bien y dormir entre ocho y nueve horas. Él hace trabajos aeróbicos, hace pesas, hace piernas, hace cuestas, trabajos de fuerza con series salvajes, que casi no pueden ni hacer los atletas…".
Aznar y su mejora física
"Es que hacer un buen ejercicio es como preparar una buena sopa: hay que echar buenos productos en su justa medida. Y él sabe la receta. No hace falta grandes gimnasias ni estadios olímpicos. Se puede hacer gimnasio en la calle y en cualquier sitio. José María no falla ni un día. Esté donde esté. En Londres, California, Sudamérica…", señaló Bernardino.
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José María Aznar y Bernardino Lombao forjaron un tándem casi icónico. "¿Que cómo nos conocimos por primera vez? Eso ya es mucha historia. Durante una ocasión, en La Moncloa, en el vestuario había un aparato de esos para hacer gimnasia que se venden en El Corte Inglés. Era el vestuario de Adolfo Suárez en la zona de la pista de tenis. Le pregunté a José María si lo usaba y me dijo que no. Al poco tiempo, me encontré con él y me comentó que quería entrenar. Yo le puse la condición de que tenía que ser disciplinado. Y lo hizo. Es un fenómeno. Hemos entrenado muchos días a las seis de la mañana en la zona de La Moncloa. ¡Con el frío que hace por allí!", señaló.