Belén Esteban finalmente ha regresado a 'Sálvame'. Y lo ha hecho respondiendo a todos los temas de actualidad y, sin duda, no ha dejado indiferente a nadie. La colaboradora ha regresado con mucha energía y con la máxima ilusión después de cinco meses sin hacerlo.
Recordemos que su última aparición fue el 25 de abril cuando se fracturó la tibia y el peroné por culpa de una mala caída mientras hacía un juego en pleno directo. Después de varias intervenciones, hasta cinco, y de una dura rehabilitación, la 'princesa del pueblo' ha vuelto a su puesto de trabajo ayudándose de las muletas todavías. Se mostraba contenta por regresar porque era algo que estaba deseando hacer para retomar la rutina y para reencontrase con sus compañeros.
La de Paracuellos del Jarama confesaba que ha vivido un verano intenso y largo, en el que ha atravesado momentos importantes, como la graduación universitaria de su hija, Andrea Janeiro. Una enorme alegría tras superar otro inesperado problema de salud, del que contó los detalles el pasado julio en el 'Deluxe': "Estuve dos horas en el quirófano y me quitaron un pólipo, ayer mismo me dijeron el resultado de la biopsia", contó en aquella ocasión.
Afortunadamente, esto ya es algo del pasado y ahora se encuentra mucho mejor, aunque todavía continúa con el proceso de recuperación. La colaborada volvía dejándonos, como siempre suele hacer, boquiabiertos con una serie de confesiones.
En primer lugar, cuando 'Sálvame' no llevaba ni media hora de emisión, al respecto de la comentadísima aparición de Olvido Hormigos en 'Deluxe' sobre su descenso a los infiernos y su vida alejada de los medios, Belén Esteban tendía la mano a la exconcejala, conmovida por todo lo que había contado el pasado viernes. De hecho, a pesar de lo enfrentadas que han vivido todos estos años, enterraba el hacha de guerra y le deseaba lo mejor para el futuro.
Asimismo, en relación con el asunto de Olvido Hormigos, ha aprovechado para echar la vista atrás y hablar de sus adicciones pronunciando por primera vez en televisión las siguientes palabras: "Yo he sido drogadicta hace 14 años y ahora soy una mujer nueva y renovada", mostrándose orgullosa y feliz de haber podido superar con éxito esta enfermedad. Inmediatamente después, su compañería Lydia Lozano le comentaba: "Ya no dices... 'estoy malita' ", a lo que Belén ha asentido naturalizando su paso adelante.
Continuando con el mismo asunto, junto a la 'amenaza' de un nuevo compañero, Belén también ha querido destacar su esfuerzo y sacrificio para conseguir un ansiado equilibrio, sobre todo económico. "Puedo decir que ni he robado ni he matado, todo lo que tengo es mío y de mi hija".
La relación está más tensa que nunca: la agria indirecta de Belén Esteban que pone todo patas arriba
Por último, cabe mencionar que la bienvenida de sus compañeros ha sido cariñosa y afectuosa, no tanto como el recibimiento a la 'princesa del pueblo' que ha sido discreto en comparación con el que le prepararon el 26 de julio. En aquella ocasión, llevaba 90 días sin pisar el plató y la estaban esperando pancartas y música mientras ella llegaba en descapotable.