El programa FAQS ('Preguntes Freqüents') de TV3 volvió a convertirse este sábado en un aquelarre antiespañol y antimonárquico con motivo del polémico chat en el que un grupo de ex militares retirados realizaban comentarios muy desafortunados, llegando incluso a hablar de una "purga" de los votantes de izquierdas: "Hay que aniquilar a 26 millones", afirmaban. El espacio de TV3 aprovechó esta circunstancia para cargar contra el Ejército y contra el Rey con Pilar Rahola y Karmele Marchante como cabecillas.
Apoyándose en el testimonio de José Ignacio Domínguez, teniente coronel retirado del Ejército del Aire y miembro del Foro Milicia y Democracia, ambas intentaron hacer ver que el Ejército es una institución franquista, pero se encontraron de frente con el periodista Israel García-Juez, que no dudó en ponerles los puntos sobre las íes. Fue un todos contra uno, pero el único que argumentó fue García-Juez, que humilló a sus oponentes llegando éstas incluso a amenazar con abandonar el plató...
Israel García-Juez: "Eso que ha dicho es una absoluta infamia y absolutamente impresentable. Decir que el Ejército español es franquista porque lo dice José Ignacio Domínguez... Vamos a ver si somos un poquito serios"
Pilar Rahola: "No, lo dicen ellos. Leéte los manifiestos. ¡Que son golpistas! Ya está bien, hombre".
La discusión fue subiendo de tono y la presentadora del programa, Cristina Puig, tuvo que poner orden porque con tantos gritos no se entendía nada.
Israel García-Juez: "Es que no se puede insultar de esta forma al Ejército español"
Pilar Rahola: "Pero ellos si nos pueden insultar a nosotros, ¿no? A ti no te fusilarán, a mí sí".
Israel García-Juez: "Hay que recordarle a la gente que Franco murió hace ya 45 años, con lo cuál técnicamente es imposible que el Ejército sea franquista. Con todos mis respetos, o hablamos del chat tristemente famoso o hablamos de las soplapolleces que dice este señor, para mí lo son. Son 70 tíos que escriben un chat, no es todo el Ejército. Este señor ha insultado a un colectivo formado por 100.000 personas"
Karmele Marchante: "Yo no he venido aquí para escucharte decir sandeces y mentiras. No te has enterado de nada, estás haciendo apología del franquismo".
Este era el nivel. Israel García-Juez intentaba poner cordura y Pilar Rahola y Karmele se dedicaban a despotricar sin aportar ni un solo argumento, simplemente el insulto por el insulto y con una flagrante manipulación. De hecho, ambas intentaban dar a entender que el periodista madrileño es partidario de los fusilamientos comentados en el famoso chat: "Estáis mezclando las dos cosas", se defendía indignado. La presentadora, cada vez que podía le quitaba la palabra para que no pudiera defenderse y que la audiencia independentista quedara satisfecha. La tensión, en cualquier caso, continuaba.
Karmele Marchante: "El Rey no ha dicho nada, se está filtrando que quizá en la Pascua militar o en el mensaje de Navidad. El hijo del ladrón salió el día 3 de octubre después de que se habían puesto unas urnas y una gente que estaba votando pacíficamente para hacer un discurso institucional reforzando la semilla de lo que ahora toda esta gente está diciendo. Él está en un terreno abonado donde está el 80% del Ejército".
Pilar Rahola: "Karmele, es que yo no dudo que el hijo del ladrón como tú dices votaría a Vox, esta es la mentalidad que destila". Ambas se daban la razón como a los tontos.
Israel García-Juez: "El instigador de este chat abandona el Ejército en 1976, os lo digo para que os informéis un poco", exponía Israel García-Juez, un dato demoledor que las dos cacatúas no pudieron soportar, levantándose de la mesa y amenazando con abandonar el plató: "Sois unas grandes tertulianas, esto no lo he visto nunca. Eso de que no me gusta lo que dice uno, me levanto y me voy. Menos mal que lleváis toda la vida en la tele", espetó el periodista.
Queda demostrado una vez más lo que es 'Preguntes Freqüents', un programa en el que solo tiene cabida un tipo de opinión y en el que, si por casualidad o por error aparece alguien que les lleva la contra se le acalla con prácticas cuasi mafiosas.