El programa de Risto Mejide, 'Todo es mentira', volvió a hacer honor a su nombre al confesar que engañaron a la audiencia al acusar a Atresmedia sobre el caso Carlota Prado. En varias cadenas del grupo Atresmedia se habló sobre el juicio que enfrenta a la chica que fue violada en Gran Hermano contra el programa de Mediaset, cancelado por un periodo indeterminado, y Risto y compañía se atrevieron a acusar al grupo de llevar a cabo una campaña de desprestigio.
Risto Mejide se libró de leer el comunicado admitiendo su culpa, algo que tuvo que hacer Marta Flich en nombre de Mediaset. Un trago que pasó lo más rápido posible y a la vuelta de una de las pausas publicitarias para tratar de minimizar el impacto del comunicado por aquello de la gente que hace zapping en los anuncios.
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"El pasado 29 de noviembre de 2019 se afirmó en este programa que Atresmedia y su director general estaban detrás de una supuesta campaña de desprestigio de Gran Hermano ante las informaciones difundidas en numerosos medios de comunicación sobre la causa penal que actualmente se sigue en los juzgados de Instrucción de Colmenar Viejo, Madrid, por la presunta comisión de un delito de abuso sexual en una de las ediciones del programa Gran Hermano", comenzó leyendo Flich.
"Para justificarlo se aludía a la participación como tertuliano en algunos programas de Atresmedia y del director del medio de comunicación digital El Confidencial, que no forma parte del grupo Atresmedia. En relación a estos hechos, se rectifica que ni Atresmedia ni su director general han participado en una campaña de desprestigio contra Mediaset ni tampoco han dado instrucciones a El Confidencial u otro medio al informar sobre esta causa penal", finalizó.
No es la primera vez
Javier Gómez ya tuvo que leer un texto similar sobre el mismo tema, aunque más breve, en julio de 2020: "Atresmedia manifiesta que no ha participado en la campaña de desprestigio contra Mediaset en relación con la presunta comisión de un abuso sexual en el seno de una pasada edición del programa Gran Hermano".
En 'Todo es mentira' acusaron directamente al director general de Atresmedia, Javier Bardají, de haber fomentado una campaña de desprestigio contra Mediaset tras salir a la luz el polémico vídeo de Carlota Prado siendo informada en el confesionario sobre el presunto abuso sexual del que había sido víctima, momento en que además le mostraron las imágenes.
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Mediaset llegó incluso a emitir un comunicado acusando directamente al grupo Atresmedia de ser el responsable del revuelo que se armó: "Mediaset España lamenta profundamente la confusión creada por la campaña denigratoria contra Gran Hermano sobre hechos ocurridos dos años atrás. Las acciones de desprestigio están siendo avivadas de manera desleal desde los espacios y programas informativos de Antena 3, La Sexta, Onda Cero y algunos de sus portales verticales, a los que también se suma el diario La Razón, con el que comparte accionista el grupo editor".
Ahora ha quedado demostrado que, efectivamente, todo era mentira. Si no quería escándalo, Mediaset tendria que haber actuado de otra forma con el caso Carlota Prado.