Antonio David Flores ha dado su opinión sobre la posible reconciliación entre su hija, Rocío Flores, con su madre, Rocío Carrasco.
Padre e hija tienen una relación muy buena y sincera y, es por ello, que quieren lo mejor el uno para el otro. Aurelio Manzano ha adelantado el contenido de una revista realizada por el periodista, José de Santiago, a Antonio David en la que deja claro su opinión sobre la reconciliación entre ambas.
Antonio David quiere acercamiento
A Antonio David le parece estupendo que madre e hija vuelvan a tener relación pero estas palabras pueden tener un efecto rebote. En el caso de que se solucionaran las cosas entre Rocío Carrasco y sus hijos sería en la intimidad. Que Antonio David haya hablado de esto públicamente hace que Rocío pueda pensar que cualquier novedad que haya salga en televisión.
A Rocío Carrasco ya le han propuesto que aparezca en Honduras para reconciliarse con su hija y hacer que 'Supervivientes 2020' tenga récord de audiencia. La productora está dispuesta a pagar 100.000 euros a Rocío para que este acontecimiento ocurra.
La respuesta de Carrasco es el silencio: “El hecho de que no haya hablado nunca no significa que el que calla otorga”.
Malos comentarios hacia su madre
La concursante de 'Supervivientes 2020' está dispuesta a volver a tener relación con su madre ya que llevan ocho años sin saber nada la una de la otra. Rocío Flores dijo desde Honduras el día del cumpleaños de su madre: “Jamás he hablado mal de mi madre ni lo haré. Por mucho que hayamos discutido, la quiero igual que a mi padre”.
A pesar de que Rocío Flores haya dicho que no ha hablado mal de su madre, han salido a la luz unos mensajes de 2012 en los que no tenía ningún problema en hablar mal de su madre: "Que te levante tu madre a estas horas para recoger no sé qué de tu hermano… No, y menos un sábado. Te odio, mamá”.
Su madre no era el único objetivo de sus críticas, Flores también atacó a su novio, Fidel Albic, en Twitter: “Querido novio de mi madre, siento decirte que tocas de puto culo la guitarra. Te ruego que te dediques a otra cosa y que te calles ya, joder. ¡Uf!”.