Después de 18 años al pie del cañón, la canciller alemana, Angela Merkel, ha confirmado su decisión de renunciar como líder de su partido conservador. Eso sí, seguirá ejerciendo de canciller hasta el final de la actual legislatura (2021).
El inesperado anuncio de Merkel llega tras dos fracasos en las elecciones estatales de Hesse para la "Gran Coalición" del gobierno federal de la Unión Demócrata Cristiana, su hermana de Baviera, la Unión Social Cristiana y los socialdemócratas de centro-izquierda.
La dirigente alemana, que parece dispuesta a ir preparando el terreno para una transición ordenada, ha tenido serios problemas con su nuevo gobierno por las continuas luchas internas de sus integrantes.
Merkel ha afirmado que ve "muchas posibilidades de riesgos" en su plan de dejar el liderato de su partido en diciembre. También hizo autocrítica y se posicionó como la principal responsable del mal comienzo de su gobierno en lo que es su cuarto mandato.
Presidenta de la CDU desde el 2000
Merkel ha ejercido de presidenta de la CDU (Unión Demócrata Cristiana) desde el año 2000 y su renuncia provocará un efecto dominó en el organigrama interno del partido conservador alemán.
No obstante, la agencia de noticias alemana, DPA, tuiteó que Merkel quiere seguir siendo la canciller pese a querer renunciar a la presidencia de su partido.
Para las próximas elecciones nacionales, previstas para el 2021, la agrupación política tendrá que buscar un sustituto para suplir la marcha de la dirigente alemana.
La sucesora que se postula como favorita de ser la próxima presidenta es la secretaria general del partido, Annegret Kramp-Karrenbauer.