Bernardo Pantoja ha sido noticia en los últimos tiempos por su delicado estado de salud, de hecho, han sido muchas las veces que su hija, Anabel Pantoja, ha tenido que viajar hasta Sevilla por la preocupante situación en la que se encontraba. En la mañana del pasado viernes, finalmente, el padre de Anabel Pantoja ha muerto a los 69 años tras llevar ingresado un tiempo.
El pasado 31 de agosto, Bernardo, era ingresado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío en Sevilla debido a una infección. Han sido muchos los baches de salud que ha tenido debido a la diabetes que padecía desde hace años, pero lo cierto es que siempre había conseguido recuperarse y salir adelante.
Anabel Pantoja, destrozada tras su paso por Supervivientes: ha recibido la peor noticia posible
De hecho, una de las grandes preocupaciones de Anabel Pantoja antes de irse a Supervivientes, fue el estado de su padre. Dejó todo arreglado para que no le faltara de nada durante su ausencia. En los últimos meses ha estado entrando y saliendo del hospital de manera continuada.
Las alarmas saltaban cuando Anabel Pantoja cogía un AVE desde Madrid a la capital andaluza y su tía, Isabel Pantoja, abandonaba Cantora para acudir también al centro hospitalario en las últimas horas de donde no ha salido, permaneciendo al lado de su hermano hasta el último momento.
Bernardo ha muerto acompañado de sus hermanos Isabel, Agustín y Juan y también de su hija Anabel Pantoja, que está desolada. Sin embargo, su muerte viene con polémica detrás, debido a la gran tensión que existe entre la familia del fallecido con su mujer, Junco, a la que han puesto muchos impedimentos para que pudiera estar a su lado. Según contaron en 'Sálvame', "la invitaron a salir de la habitación" y tuvo que estar en varias ocasiones en la cafetería al no dejarla entrar.
Antes de contraer matrimonio con Junco, Bernardo había estado casado anteriormente, en febrero de 1986, con Mercedes Bernal, una funcionaria de Sevilla, con la que tuvo a su hija, Anabel Pantoja, que nació a los cinco meses de la boda. Seis años después, el matrimonio se separó y se produjo un distanciamiento entre padre e hija.
De todos es sabido que la relación con su padre no ha sido la más idílica, pero si hay algo que ha querido Anabel Pantoja en todo momento es tener comunicación, algo que su madre Mercedes siempre le inculcó. Por eso, cada vez que viajaba al sur para reencontrarse con los suyos, Anabel no dudaba en pasarse por la casa de su padre y compartir su tiempo con él. A pesar de sus altibajos, Anabel siempre ha dicho públicamente que tenía a su padre "en un pedestal" y que le ha querido "con locura".
Por su parte, Kiko Rivera, no se encontraba en el hospital porque según contó Rafa Mora "no le habían informado de la gravedad del asunto" y eso que "Kiko y su tío siempre han sido uña y carne y han tenido una relación excepcional. El pasado 8 de septiembre, Anabel Pantoja acudía al hospital para celebrar su 68 cumpleaños y hoy, despide, entre lágrimas a su padre.