Mientras el Gobierno impone la Ley Celaá, que elimina al castellano como lengua vehicular en los colegios españoles, en Cataluña prosiguen con su política supremacista de imponer el catalán por las buenas poniendo en peligro la supervivencia del idioma común de todos los españoles en esa zona.
Penalizan el castellano
El Gobierno de Sánchez es rehén de sus pactos con el independentismo y permite todas las barrabasadas que continuamente se producen en la Enseñanza catalana en contra del idioma de castellano, que en lugar de unir a todos los españoles, está siendo utilizado como elemento de discordia por el independentismo antiespañol.
Escándalo en Cataluña (otra vez): Abacus investiga a una cajera por hablar en castellano
La última fechoría se ha vivido en el Instituto Montserrat Colomer de Sant Esteve Sesrovires. Ahí, con total impunidad, sus responsables penalizan con medio punto a los alumnos que presenten su trabajo de investigación en castellano, según denuncia e-noticies.com.
Lengua extranjera
La misma fuente denuncia que una profesora comunicó a un alumno a través del correo electrónico que el centro penalizaba con 0,25 puntos si el trabajo no era redactado en catalán y con otros 0,25 si no se exponía en esa lengua.
La educación que espera a los niños de Cataluña: ¡¡Puigdemont no sabe ni hablar el castellano!!
Así lo explica: "La lengua vehicular del centro es el catalán. No usarla en el trabajo escrito penalizará en 0,25 puntos sobre el total de la nota, y no usarla en la exposición oral unos 0,25 puntos sobre el total. Este punto no se aplica si el trabajo se realiza en lengua extranjera" .
Y la docente aconseja al alumno "hacer un guión y memorizarlo" y "practicar varias veces hasta que lo memorices". "Verás que al final te sale solo".
Y mientras estas cosas suceden en Cataluña asumidas como "normalidad", Pedro Sánchez y su Gobierno miran hacia otro lado.