La visita de Carles Puigdemont a la tumba de Antonio Machado en Colliure no ha dejado indiferente a nadie.
Y mucho menos a Albert Soler, que ha tomado 'prestada' la pluma del afamado escritor para responder, con mucho humor, a la visita al cementerio del 'exiliado'.
"Si no fuera que los fallecidos no nos está permitido reír, la imagen de aquel tipo de abrigo oscuro y sonrisa de chiflado, haciéndose decir exiliado, me habría hecho estallar en carcajadas" escribe Soler-Machado en su columna en el Diari de Girona "Ya me hubiera gustado a mí tener un exilio de cinco estrellas como el suyo".
Mantiene la crítica ante la desfachatez de Puigdemont de considerarse un exiliado y compararse con el escritor.
"Los exiliados de mi época no teníamos tiempo de ir a hacer el papanatas en el cementerio. Íbamos sólo en el último momento y con las piernas por delante" describe Soler.
Y no sólo eso,si no que el periodista aprovecha para hacer una descripción 'al detalle' de la ignorancia del independentista.
"Los reconozco bien, los que no saben nada de mí y vienen sólo a hacerse la foto, vanidosos todos ellos.Son divertidos incluso en su ignorancia, y este en concreto supera todo lo que he visto en las últimas ocho décadas [...] Incluso pretendía colgar una bandera aquí, junto a la bandera de mi España, la republicana. Alguien dijo que era una falsa de respeto, pero no lo creo, era simple y llana ignorancia, se ve a la primera que es hombre de pocas luces".
Las críticas han sido inmediatas
Pese a que muchos seguidores del periodista le han agradecido y reconocido la agudeza de su columna, a los independentistas no les ha hecho especial ilusión la forma de tratar a su líder fugado.
"Ridiculizar y reírse de un exiliado que va a rendir homenaje y respeto a un poeta muerto después de haber sido exiliado por el fascismo es de ser muy miserable" escribía Josep Galindo en Twitter. (Pilar Rahola, si esto es "lo mejor de Cataluña" ahora entendemos muchas cosas)
Soler tampoco ha limitado su respuesta: "Son maneras de verlo. A mí me parece miserable el Vivales, por engañar a la gente y por querer apropiarse de la memoria de alguien que si estuviera vivo le despreciaría como la babosa que es".