El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, visitó en 2015 (antes de las elecciones generales del 20 de diciembre) ‘El Intermedio’, donde El Gran Wyoming le había preparado una emboscada.
Rivera evitó el debate sobre la decisión de quitar placas franquistas de las calles y las plazas de España.
Wyoming, sin conseguirlo, intentó ponerle en apuros con un comentario del todo tendencioso y populista: "Es triste servicio honrar la memoria de una víctima y querer vivir en la plaza del señor que lo mató".
"¿Dónde ponemos el crono de la historia, en la dictadura, los reinados absolutistas...?", se preguntó Albert Rivera, que opinó que hay que honrar a las víctimas y a sus familias para que puedan enterrar a sus seres queridos pero que el tema de las placas era otro debate y que para él no era primordial.
"Si soy presidente me comprometo a que las familias tengan acceso a sus muertos. Propongo un pacto entre todos los partidos, gobierne quien gobierne", sentenció Rivera.