El antimadridismo de la nueva junta directiva del FC Barcelona es insostenible. Joan Laporta siempre ha guardado un resentimiento especial a Florentino Pérez, puesto que este último se ha coronado como el mejor presidente de un club de fútbol de la historia del deporte, con el permiso de don Santiago Bernabéu. El abogado catalán intentará boicotear uno de los sueños de Florentino: el fichaje de Endrick.
La falta de ideas del Barça es preocupante pero también peligrosa: ya han puesto el ojo en el jovencísimo jugador brasileño, cuyo futuro todavía peligra. A día de hoy solo hay una cosa clara: quiere jugar en España, en LaLiga, ya que busca seguir los pasos hacia la gloria futbolística de su ídolo, Neymar Jr. Florentino Pérez está convencido de poder atraer a Endrick de forma definitiva.
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La disputa entre ambos presidentes está en su punto álgido. Ambos están mandando una oferta tras otra a la sede del Palmeiras, que ya ha aclarado que no contestará ni revisará ninguna oferta de traspaso: quien quiera hacerse con los servicios de Endrick, debe preparar 60 millones de euros. Mientras que Florentino Pérez considera que es una cantidad algo elevada para un jugador juvenil, Joan Laporta ha corrido a activar una nueva palanca para obtener el dinero suficiente como para pagar su rescisión.
Los gestos se han ido sucediendo a lo largo de estas semanas: mostrando un poco de iniciativa y avanzando que sabe hacer algo más que copiarle las estrategias y la política de fichajes a Florentino Pérez, Laporta invitó a Endrick y a su familia al Camp Nou para ver las entrañas del estadio. Florentino Pérez hizo lo propio y mostró el aspecto del Nuevo Bernabéu, cuya construcción avanza viento en popa. Además, el Real Madrid contó con la ayuda de Vinícius Jr. y Rodrygo Goes como guías para intentar convencer a Endrick de que venir al Real Madrid es la única decisión correcta.
Laporta, decidido a boicotear al Real Madrid, quiere abonar la clásula de rescisión cuanto antes para incorporar a Endrick a una abarrotada plantilla de jugadores atacantes. El brasileño debería analizar la situación y percatarse que el Barça, entre Real Madrid y Barcelona, es el club peor posicionado para asegurar su crecimiento como futbolista. La abultada cantidad de delanteros con la que cuentan los culés obligaría a Endrick a jugar en el Barça Atlètic.
Sin embargo, si fichara por el Real Madrid, que lo conoce bien gracias al inmenso trabajo de Juni Calafat, se podría llegar a un acuerdo beneficioso para ambas partes: Endrick podría entrenar y jugar con el primer equipo en una temporada, dos a lo sumo. Su estancia en el Real Madrid Castilla serviría como un periodo de adaptación y crecimiento como futbolista y como persona aprovechando los últimos años de Benzema como '9' blanco. En ese momento, Endrick sería su sustituto ideal y tendría ficha del primer equipo.
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Sin embargo, esta estrategia podría quedar en agua de borrajas si Florentino Pérez no se da prisa en convencer a Endrick y al Palmeiras de que negocien exclusivamente con el Real Madrid y que dejen de lado al FC Barcelona, que intenta copiar la estrategia de fichajes del Real Madrid en un pobre intento de Laporta de imitar a Florentino Pérez.