Uno de los momentos que los humanos están deseando después de un día de rutina y trabajo es llegar a casa y recibir el amor de su mascota.
Y es que los animales reciben a estos como si hubieran pasado años sin verse, aunque solo hayan sido unas horas.
Pero el recibimiento de este perrete a su dueña te terminará de enamorar por completo.
El can se encuentra pegado a la puerta y nada más abrirla este levanta las dos patitas delanteras hacia arriba para que le abrace y le de muchos mimos.