La salvadoreña Evelyn Hernández, de 21 años, está acusada por la Fiscalía de homicidio agravado cometido al supuestamente abortar y se ha declarado inocente.
"Gracias a Dios estoy bien. Yo soy inocente confío mucho en Dios y en mis abogados", ha explicado Evelyn a las puertas del Centro Integral de Justicia de la localidad de Ciudad Delgado. (La brutal violación en manada a una niña de 12 años en Azuqueca)
En el lugar de la audiencia llegaron activistas que luchan contra la despenalización del aborto en el país y defensores de derechos humanos para apoyar a la procesada. La fecha del nuevo juicio fue cambiada en cuatro ocasiones por diversos motivos y se espera que próximamente se tome una decisión sobre la joven salvadoreña.
Los hechos ocurrieron en 2016, cuando Evelyn sintió un fuerte dolor abdominal. Empezó a sangrar mucho y, pocos segundos después, perdió el conocimiento.
La acusada tenía 18 años por aquel entonces y había sido víctima de sucesivas violaciones durante meses pero nunca llegó a denunciar a su agresor por miedo a que cumpliese con sus amenazas e hiciese daño tanto a ella como a su familia.
Su madre la llevó al hospital, donde le determinaron que había sufrido un aborto. Los médicos alertaron a las autoridades y, desde aquel momento, comenzó su particular infierno. (Los detalles de la asquerosa violación de la manada valenciana)
Condenada a 30 años de cárcel
Hernández, una joven de escasos recursos que reside en una zona rural del país centroamericano, fue condenada en julio de 2017 a 30 años de cárcel por el delito de homicidio agravado, pero en diciembre de 2018 la Sala de lo Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) anuló el fallo emitido por el Tribunal de Sentencia de Cojuteque.
En El Salvador, las mujeres que sufren complicaciones del embarazo que dan lugar a abortos espontáneos y mortinatos son habitualmente sospechosas de haberse practicado un aborto, prohibido en todas las circunstancias y tipificado como homicidio agravado, cuya pena de cárcel es de 30 años.