Por fin se les reconoce una pensión a estas personas, 500 euros y ya pueden pedirla

Las amas de casa desempeñan un papel crucial en el hogar, dedicando su vida al cuidado de los niños y los ancianos, y al mantenimiento de la vivienda.

Sin embargo, a pesar de la importancia de su labor, muchas de ellas han vivido  sin ninguna clase de seguridad económica, especialmente al llegar a la edad de jubilación.

Esta situación se debía a que, al no estar inscritas en la Seguridad Social ni contar con un contrato de trabajo formal, no podían acceder a las pensiones contributivas que tradicionalmente han sido la base del sustento para los jubilados en España.

Requisitos para acceder a la pensión del Imserso

La pensión, que puede alcanzar hasta 517,90 euros mensuales, está dirigida a personas mayores de 65 años que cumplan con una serie de requisitos específicos.

En primer lugar, es necesario que el solicitante resida en España y lo haya hecho durante al menos 10 años, en el período comprendido entre los 16 años de edad y la fecha en que se solicita la pensión. De estos 10 años, al menos dos deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la solicitud.

Otro de los requisitos fundamentales es la carencia de ingresos. Es decir, los ingresos personales del solicitante, en cómputo anual, no deben superar los 7.250,60 euros en 2024.

En el caso de convivencia con parientes de primer grado, como hijos o padres, los límites de ingresos también varían. Para un hogar de dos personas, los ingresos no deben superar los 30.815,05 euros anuales; para tres personas, el límite es de 43.503,60 euros; y para cuatro, 56.192,15 euros.  Por cada persona adicional en el hogar, el límite aumenta en 12.688,25 euros anuales.

Limitaciones y compatibilidad de la pensión

Es importante destacar que esta pensión no contributiva es incompatible con otras pensiones, como las de invalidez o las asistenciales.  Esto significa que, en caso de cumplir los requisitos para varias prestaciones, solo se podrá solicitar una.

Sin embargo, para muchas amas de casa, esta pensión representa un alivio económico que, aunque llega tarde, les permitirá tener un ingreso asegurado durante sus años de jubilación.

La concesión de esta pensión es un paso hacia el reconocimiento de la importancia del trabajo no remunerado  en la sociedad española. La existencia de esta ayuda es un avance significativo que podría inspirar futuras políticas más inclusivas.

Por tanto, esta pensión del Imserso supone una oportunidad para que miles de amas de casa y otros cuidadores no remunerados puedan disfrutar de una jubilación  con mayor seguridad económica, reconociendo finalmente la labor que han realizado durante años, muchas veces en silencio y sin ningún tipo de retribución económica directa.