Alberto Núñez-Feijóo tenía afilados los cuchillos para la noche del 26-M, fecha en la que todos los pronósticos barruntaban debacle para Pablo Casado. Pero Génova 13 respiró con alivio tras recuperar la ciudad de Madrid y mantener la Comunidad.
Poco tenía que celebrar a la misma hora Feijóo, que veía cómo seis de las siete principales alcaldías gallegas estaban en manos de la izquierda: Vigo, Pontevedra, A Coruña, Ferrol, Lugo y Santiago. El PP solo podría salvar Ourense, y tampoco es seguro.
Luis Herrero le mete el dedo en el ojo a Feijóo
Explica Luis Herrero en Libertad Digital que "el único varapalo notable de la derecha se ha producido en Galicia. La izquierda gobernará en las cuatro capitales de provincia, además de Santiago y Vigo. Si alguien del PP salió de la contienda de ayer gravemente chamuscado, ése fue Núñez Feijóo. En el caso de que tuviera la guadaña afilada para segar el cuello de Pablo Casado hará bien en devolverla al aparador".
El periodista recuerda que "el líder del PP sale fortalecido. Mejora los resultados de hace veintiocho días (en número de votos y en porcentaje) a pesar de que hubo cuatro millones de votantes menos, retiene la Comunidad de Madrid, gana la capital de España, aleja a Ciudadanos de su rueda y conserva, grosso modo, el poder territorial que tenía".
Por último, subraya la decepción de Vox: "No se puede decir lo mismo de Rivera y Abascal. Ciudadanos no tiene opción de gobernar en ninguna Comunidad Autónoma y en ninguna capital (salvo que permute con Lambán la alcaldía de Zaragoza por el gobierno regional), y ha perdido un millón cuatrocientos mil votos en veintiocho días. A Abascal aún le ha ido peor: ha perdido la mitad de su electorado".