El principal culpable de que los golpistas estén en prisión provisional, Carles Puigdemont, ha pedido a sus excompañeros que “sean fuertes” y “tengan ánimo” en el inicio del juicio al procés.
Acto seguido, Puigdemont se ha ido a un banquete en el edificio Reichstag, la sede del Parlamento alemán.
¿Se puede ser más hipócrita? ¿Se pueden tener menos escrúpulos? (Dos directores devuelven el premio que les había entregado Puigdemont en Berlín)
Así es, mientras Puigdemont se pegaba una copiosa cena junto a miembros de las Pussy Riot (opositoras de Putin), los políticos presos llegaban a Soto del Real tras el primer día de juicio.
Puigdemont pide "fuerza" a los presos y se pega un banquete en Berlín
Mientras Puigdemont les pide fuerza, cuando en realidad tendría que estar con ellos dando cuentas ante la justicia por el Golpe de Estado perpetrado en Cataluña, los políticos presos se quedaban sin cena caliente en la cárcel madrileña.
Y es que Junqueras, Romeva y compañía llegaron a Soto del Real tras el primer día de juicio cuando la cena ya se había servido, y se tuvieron que contentar con una cena fría a base de verduras, tomate y melocotón en almíbar.
Por suerte, algunos ya han criticado la cobardía y la hipocresía del expresidente fugado de la Generalitat:
"He dicho y mantengo que mientras otros entraban en la cárcel, usted subía fotos a Twitter de sus comilonas en Bélgica. Dos maneras bien diferentes de encarar los principios en política", critica Mónica Oltra.